No estaba preparada para salir de esta pesadilla. Sí , era una pesadilla pero a pesar de que me hiciera daño quería seguir recordando esos momentos.
Los sonidos que llegaban a mis oídos ya no eran tan dulces como imaginaba y las voces de las personas cada vez me parecían mas agrias. Quizás yo siempre estaba pensando en mis cosas y no le daba importancia a mi alrededor.
Observaba el suelo, y vi unas pocas hormigas. Entonces pensé que para lo pequeñas que eran, estaban todos los días trabajando e intentando sobrevivir. Y yo aquí, un ser humano sin poder hacer nada en este mundo.
Desde que se fue no he encontrado ninguna salida a este infierno y mi vida se a convertido en un laberinto en el cual, no veo la salida.
Lo único en lo que aún veía su belleza, era la naturaleza. Acogedora, reluciente y pura.
Entonces fue cuando me evadí de todos los pensamientos malignos y empece a escribir sobre la belleza que tenía delante.
¡Pues claro que sí! A veces nos aferramos tanto a una idea que nos perdemos todo lo que tenemos alrededor, y eso no debe ser así, hay que saber vivir con los pies en la tierra, pero mirando hacia arriba :)
ResponderEliminarTienes un premio en mi blog^^
¡Un grandísimo saludo! :*
Nunca vemos más allá. Gracias, lo haré el próximo día.
EliminarUn saludo :)
Hola, Ana :)
ResponderEliminarCuando entramos en un pozo oscuro, nos cuesta ver que hay una salida ahí arriba, que podemos escapar de ese dolor y tristeza. Cuesta mucho, pero llega un día en que te levantas y dices, hoy puedo, y poco a poco lo vas asimilando y empiezas a mirar más hacia el futuro y no tanto hacia el pasado. He leído unas cuantas entradas tuyas y he podido deducir que no estás bien, que sepas que puedes contar conmigo :)
¡Un beso muy muy muuy grande! <3